Buen viaje!
Ya es otro quien tiene la bota, y este blog, y el vértigo del qué-hacer por delante, ahora completamente vacío.
Durante el canje discutíamos sobre la banalidad de los blogs. Como la bota. Como la vida.
Buen viaje.
Crónicas de una bota singular contadas por sus compañeros de viaje en su búsqueda de un destino. O no.